Toda la información referente a la nueva ley GDPR es difusa, compleja, llena de formalismos, y en algunos casos ambigua. Todo ello unido a la fecha tope del 25 de Mayo del 2018 y el anuncio de grandes multas está generando un revuelo de incertidumbre y relativo pánico en el ecosistema emprendedor y de startups. Si bien es verdad que hemos tenido mucho tiempo para prepararnos, todos dejamos este tipo de cosas para el último momento. La falta de claridad en la definición de la misma ha generado una situación de «wait & see» y esperar a ver qué hacen los demás o empresas grandes como Facebook o Google.
Dicha situación me ha llevado a investigar por mi cuenta y a preguntar algún experto que otro. En este artículo he intentado sintetizar lo más importante que pueda afectar a las startups adaptando el lenguaje y aterrizando a la práctica algún que otro concepto. Espero os pueda servir de ayuda al menos eliminar la incertidumbre que esta ley os pueda estar generando.